domingo, junio 24, 2012

Deseo...

"Deseo que pudieran ver"

Deseo que supieran lo que es buscar a un niño atrapado dentro de un
auto deshecho, con aceite o flamas enrollándose sobre sus cabezas, las
palmas de sus manos y sus rodillas quemándose y cortándose mientras se
arrastran, el piso bajo ustedes crujiendo mientras se incendia.

Deseo que pudieran entender el horror de una esposa a las tres de la
madrugada mientras yo evalúo a su esposo de cuarenta años de edad, sin
encontrar un pulso. Comienzo maniobras de RCP de todas formas,
esperanzado a traerlo de regreso, aún cuando sé desde mis entrañas que
es demasiado tarde; dejando saber a su esposa e hijos que se hizo todo
lo posible para intentar salvar su vida.

Deseo que pudieran comprender lo que se siente levantarse temprano
para partir al trabajo regular después de haber pasado casi toda la
noche, con frío y cansancio, atendiendo una llamada de emergencia.

Deseo que pudieran leer mis pensamientos mientras acudo a un servicio“
¿es falsa alarma o una emergencia realmente? ¿cómo esta el lugar a
donde voy? ¿qué peligros me esperan? ¿acaso hay alguien atrapado...?
¿qué pudo haberle pasado al lesionado? ¿se trata de algo sin mayor
importancia o compromete su vida? ¿la persona que llamo realmente me
necesita, o me espera con un arma en sus manos...?

Deseo que pudieran estar en la sala de urgencias mientras el médico
diagnostica muerte cerebral a una hermosa niña de cinco años a quien
trate de salvar durante veinticinco largos minutos. No tendrá su
primer novio y no podrá decirle a su madre que la quiere, jamás.

Deseo que pudieran experimentar la frustración que siento en la cabina
de una ambulancia, con el pie del operador en el pedal a fondo y mi
mano haciendo sonar el botón de alarma una y otra vez, en el tráfico
intenso o cuando no nos permitiste el paso y perdimos la salida del
camino que nos llevaría a nuestro destino... Sin embargo, cuando nos
necesitas, el primer comentario a nuestra llegada es “¡tardaron una
eternidad!”

Deseo que pudieran conocer mis pensamientos mientras ayudo en la
extracción de una adolescente, dentro de los restos inservibles de su
automóvil. “¿qué pasaría si fuera mi hermana, mi amiga, mi familiar o
mi novia? ¿qué reacción tendrán sus padres cuando un policía, sombrero
en mano, toque a su puerta?”

Deseo que pudieran saber lo que se siente entrar a mi casa y saludar a
mis familiares y no tener forma de decirles lo que pasó esa noche o
que por poco y no la cuento en mi último servicio...

Deseo que conocieran el dolor que se siente cuando alguien, de manera
verbal o física, abusa de nosotros o menosprecia mi trabajo, habla mal
de mis compañeros o se burla de mi uniforme, mientras expresa su
actitud de “eso nunca me pasará a mí”

Deseo que se dieran cuenta de la fatiga física y emocional o de las
comidas perdidas, de la pérdida de horas de sueño o de actividades
sociales, sumados a toda esa tragedia que mis ojos han presenciado y
mis manos han tocado.

Deseo que conocieran la satisfacción de saber que se ha ayudado a
salvar una vida de un desconocido, o de estar ahí en los momentos de
crisis, de crear orden dentro de un caos total.

Deseo que pudieran entender lo que se siente tener a un pequeño
preguntando por el bienestar de su madre, sin ser capaz de mirarlo a
los ojos, con lágrimas propias y sin saber que responder.

O el detener a un sujeto mientras se le brinda respiración de rescate
a su amigo de toda la vida, y es llevado de su lado dentro de una
ambulancia. Sabes que no llevaba su cinturón de seguridad puesto...

Al menos que hayan vivido este tipo de vida, nunca podrán entender
realmente o apreciar lo que soy, lo que somos, o lo que nuestro
trabajo realmente significa para todos nosotros...

viernes, junio 01, 2012

¿ESTAS PREPARAD@ PARA LOS HURACANES?

He aqui que tu estas sola...

http://www.youtube.com/watch?v=G6RUC9lPOo0&feature=youtube_gdata_player

He aquí...

He aquí que tú estás sola y que yo estoy solo.
Haces cosas diariamente y piensas
y yo pienso y recuerdo y estoy solo.
A la misma hora nos recordamos algo
y nos sufrimos. Como una droga mía y tuya
somos, y una locura celular nos recorre
y una sangre rebelde y sin cansancio.
Se me va a hacer llagas este cuerpo solo,
se me caerá la carne trozo a trozo.
Esto es lejía y muerte.
El corrosivo estar, el malestar
muriendo es nuestra muerte.

Yo no sé dónde estás. Yo ya he olvidado
quién eres, dónde estás, cómo te llamas.
Yo soy sólo una parte, sólo un brazo,
una mitad apenas, sólo un brazo.
Te recuerdo en mi boca y en mis manos.
Con mi lengua y mis ojos y mis manos
te sé, sabes a amor, a dulce amor, a carne,
a siembra, a flor, hueles a amor, y a mí.
En mis labios te sé, te reconozco,
y giras y eres y miras incansable
y toda tu me suenas
dentro del corazón como mi sangre.
Te digo que estoy solo y que me faltas.
Nos faltamos, amor, y nos morimos
y nada haremos ya sino morirnos.
Esto lo sé, amor, esto sabemos.
Hoy y mañana, así, y cuando estemos
en estos brazos simples y cansados,
me faltarás, amor, nos faltaremos.

Jaime Sabines