jueves, noviembre 06, 2008

Ahí estaba yo! AVIONAZO

Andaba yo cubriendo servicio de emergencia aquí, en el DF. Le hablé a un buen amigo, Ricardo Varela y que me invita a ir a su guardia, ni me hice del rogar y a las dos de la tarde ya estábamos trabajando junto con su hijo Alfredo. Acabábamos de dejar un paciente en el hospital de la Magdalena de las Salinas (Dios nos agarre confesados si caemos ahí!) y que nos llaman, las instrucciones al principio eran raras, que si era un helicóptero en la torre de Pemex, que no, que lo mismo pero en la fuente de Petróleos y la verdad es que Ricardo conoce la ciudad super bien así que entre sentidos contrarios, manejo de costera y micrófono fuimos la primera ambulancia en llegar junto con la unidad de intervención rápida de la CRM y los bomberos... Llegamos a una escena dantesca... aún habían llamas, el área estaba empezando a ser acordonada y los de PC corrían de aquí para allá como gallinas descabezadas... Así que había gente por doquier que no tenía NADA que hacer ahí. Piezas de personas, por todo lados, masa encefálica sobre los capós, siluetas de personas en los edificios, coches calcinados con restos irreconocibles dentro y por lo menos (según mis cuates de RUM que trabajaron junto con los bomberos) 30 o más muertos de a devis, además de los "importantes" del avión.

Esa hora y en ese lugar tiene un tráfico impresionante, desde salidas de oficinistas, ciclopista y corredores de a pié, (¿ven? es malo hacer ejercicio, ahora no solo te cuidas de los coches, también de los aviones) hasta paso obligado de Las Lomas hacia Polanco o periférico ...

CRM, transportó 11 quemados al Hospital Central Nuestro, de ahí los cambiaron/trasladaron vía helicóptero (yo lo recibí así que no me lo cuentan) a perisur y de ahí al hospital especializado en quemaduras GEA (¿?) donde recibieron a dos más, igual que el Vicente Leñero...


La verdad, y siento decirlo... muy, muy emocionante... muy aterrador... muy impresionante, muy muy muy... El caos de la atención creo yo, se debió a que normalmente los avionazos son en áreas deshabitadas, sin personajes de esa talla dentro y no inciden en la vida diaria de una ciudad, solamente en los deudos, en este caso la ciudad entera se desquició, entre el horror de las familias qeu buscaban a sus heridos, los bomberos qeu apagaban el fuego a riesgo real de sus vidas y de las explosiones qeu aún sucedieron con los cohces carbonizados, de las cámaras que acabaron a golpes con la PFP o una de esas, con los servicios de emergencia entre los que estábamos nosotros y que tratabamos de poner orden en el pandemonium... ¡uf! no sé... aún no puedo ponerlo bien en palabras... pero es una herida sangrante desde ya, no creoq eu cicatrice limpiamente si no se hace un verdadero esfuerzo, no creo que sea un accidente por las historias de los que estaban ahí... algunos vieron el avión estallar/implotar y una lluvia finita de ceniza empezó a caer segundos antes del impacto final que fué como les digo digno de una película de alto presupuesto.

Mientras la vida sigue, y llegué a mi casa a las doce de la medianoche, a bañarme, a meter en la lavadora mi ropa que olía a humo y a carne quemada, ya saben que ese olor se queda pegado en la nariz además, y a tratar de limpiar mis botas... de .. bueno de restos y más. Sin cenar, aún no había comido porque andábamos en una guardia movidita e íbamos a echarnos unos tacos cuando llegó la llamada. Muriéndome de hambre pero sin ganas de cocinar nada, sólo "comida de mamá" un vaso de leche caliente, mi pijama y mi cama. Y por desgracia estaba sola y el teléfono no suple ni de lejos la necesidad imperiosa de la vida de no estar solos...

Lo que me ayuda a mí, y sé que no a todos, y lo siento, es el humor negro, que me permite alejarme del dolor y poder actuar compasivamente pero sin involucrarme permitiendo que la atención sea lo mejor posible. Creo qeu muchos de nosotros compartimos esa característica que hace que no nos tiremos de cabeza en el hoyo mas cercano después de una tragedia como esta y podamos sobrevivir para en otra ocasión, dar lo mejor de nosotros mismos.

Y mientras esa ocasión llega (que llegará de una u otra manera) les mando un abrazo, los quiero mucho y es momento de recordar que hay que celebrar la vida... simplemente porque estamos vivos... por la Gracia Divina

2 comentarios:

mrbeagles dijo...

Excelente post!

Soy Paramedico de Guanatos

Saludos!

Memo Nuñez

Jorge dijo...

Muy interesante Tabi!

Saludos desde San Diego! Un abrazo.